25 de junio de 2012

Sesión académica a cargo de Juan Felipe Sánchez, Director de operaciones de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA)

Por Franco Femminini

Juan Felipe Sánchez comenzó su exposición reconociendo que Argentina es uno de los países latinoamericanos con mayor desempeño en asuntos de estrategia y seguridad internacional y que ello es de suma importancia a la hora de contribuir con planes creativos para ayudar a los cinco millones de refugiados palestinos y, en general, para ayudar en el proceso de paz del Medio Oriente.

Para Sánchez, su visita tuvo el propósito tanto de incrementar la conciencia acerca del trabajo que se ha realizado en la región de Palestina como de de estrechar aún más la relación que existe entre los países latinoamericanos y la UNRWA. Como ejemplo de la cercana relación entre los países de la región y la Agencia, señaló una reciente donación de 8 millones de dólares realizada por Brasil. El orador expresó su deseo que los demás países del globo comprendan la necesidad que existe de cooperar en la ayuda a los refugiados palestinos.

Otro de los puntos a los que Sánchez se refirió en su exposición es la situación general en Medio Oriente, recalcando las condiciones de frágil seguridad en que operan las agencias humanitarias y  la escasez de recursos. Mencionó que en Siria existen 475 mil refugiados registrados en UNRWA y que los recursos orientados a asistirlos  no pueden llegar a destino por el conflicto en la región.

Planteó que no habrá paz mientras haya refugiados que se encuentren en el "limbo político", ya que alcanzar la paz significa –también- que el bienestar de los refugiados perdure en el tiempo.

Además, sostuvo que a lo largo del pasado año y medio el mundo ha estado atento a los acontecimientos que surgieron en los regímenes de Medio Oriente y señaló que "según han demostrado los resultados de las elecciones en Egipto, Marruecos y Túnez, el panorama político que probablemente se vislumbre en las transiciones de la Primavera Árabe será complejo y diverso, a tal punto que el Islam político jugará un papel importante y esperanzadoramente positivo".

En su exposición, Sánchez declaró que los cambios iniciados a partir de movilizaciones de los ciudadanos no organizados son sistémicos e irreversibles; "es una revolución transnacional, impulsada por la tecnología y los nuevos medios de comunicación que se comparten principalmente entre los jóvenes", afirmó.

Seguidamente, se refirió al estancamiento de la cuestión de los refugiados palestinos. Desde su creación en 1949 la UNRWA ha sido la agencia encargada apoyar y proteger a los refugiados palestinos hasta tanto se encuentre una solución justa de su situación, que deberá contemplar servicios, recursos, planes de educación y de salud. En palabras de Sánchez: "UNRWA es la expresión de lo que el mundo está preparado para hacer o dejar de hacer por los palestinos".

Para Sánchez, los refugiados aún no han logrado reponerse a las situaciones que han vivido. Por ejemplo, en el Líbano continúan excluidos del sector laboral formal y viven en barrios muy precarios donde son constantemente marginados. Otro ejemplo es en Siria, donde los palestinos siempre se habían encontrado en mejores condiciones que en otros lugares, pero ahora se encuentran en peligro por el conflicto interno. Ante esto, agregó que sería muy negativo para los refugiados palestinos si fueran desplazados nuevamente.

Posteriormente, Sánchez declaró que no es cierta la acusación que se le hizo a UNRWA sobre perpetuar la cuestión de los refugiados y volvió a recalcar que UNRWA ha sido de mucha ayuda y que es la manifestación directa a los palestinos de que ellos no han sido olvidados por la comunidad internacional. Por lo tanto, el papel de la organización no es irrelevante: "UNRWA sigue siendo una fuente de esperanza para la mejora y estabilidad de la situación de los refugiados".

En cuanto a otros aspectos en los que UNRWA provee ayuda a los refugiados, su Director de Operaciones recalcó que se han reconstruido urbanizaciones enteras que han sido destruidas por bombardeos israelíes y que aún funciona un proyecto de construcción de viviendas. Además se capacitan jóvenes para que desarrollen nuevas habilidades y exploren nuevas oportunidades laborales. En síntesis, la gran responsabilidad de UNRWA es educar a los niños palestinos mediante una enseñanza estable y en un ambiente de aprendizaje sin violencia.

Antes de finalizar, Sánchez subrayó que para poder llegar a una situación pacífica en Medio Oriente es necesario que las voces de los refugiados sean escuchadas. Dijo que no hay dudas de que la comunidad palestina posee capacidades y herramientas para mejorar y crecer en todos sentidos: social, económico y educativo, pero que esto va a ser posible sólo tomando conciencia de la realidad en la que viven los palestinos hoy, en un ambiente de violencia y escasez de recursos.

Finalmente, sugirió a todos los presentes ser críticos y usar el buen juicio e intuición para examinar la situación del Medio Oriente, a fin de contribuir en nuevas soluciones y propuestas.

Juan Felipe SánchezObtuvo un BA en Relaciones Internacionales y Sociología de la Universidad Hebrea de Jerusalén y un Master en Planeamiento regional y urbano de la London School of Economics. Entre 1991 y 2000 formó parte de la organización Plan Internacional como responsable de las operaciones de terreno nacionales en El Salvador, Filipinas y Burkina Faso. En 2003 se desempeñó como especialista senior en Juventud e Infancia del Banco Mundial y en 2007 regresó a Plan Internacional como Director Nacional en Bolivia. Se incorporó a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en agosto de 2011, como representante en el área de operaciones de Cisjordania, responsable de educación, salud, ayuda y servicios de protección social de una población de aproximadamente 850 mil refugiados registrados